EVOLUCION DE LAS CUENTAS NACIONALES EN AMERICA, PERU Y EL MUNDO

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EVOLUCIÓN DE LAS CUENTAS NACIONALES EN EL MUNDO.

Antecedentes


El desarrollo de las Cuentas Nacionales se remonta al siglo XV, y tuvo sus inicios en forma casi paralela al desarrollo de diversas teorías que originaron a la ciencia económica. El primer indicio de sus orígenes se dio en Inglaterra en el año 1690. Durante el siglo XIX, no se realizaron demasiados aportes al estudio sobre el Ingreso Nacional y su distribución, y nuevamente a inicios del siglo XX estas investigaciones recobran un nuevo y fuerte impulso, motivado por el interés oficial por la comparabilidad internacional de las estadísticas económicas, mostrado en 1928 por la Liga de las Naciones, a fin de estimular la elaboración de esta clase de estadísticas y la adopción de métodos uniformes de presentación en los países con el fin de facilitar la elaboración de estimaciones del ingreso nacional a intervalos regulares. El mayor aporte a los inicios de lo que hoy se denomina Contabilidad Nacional lo dio en 1936, John Maynard Keynes con la publicación de su obra “Teoría General sobre la Ocupación, el Interés y el Dinero”, que con su teoría de la demanda efectiva revoluciona el pensamiento económico de su época y sienta las bases de la hoy moderna macroeconomía. Su obra permitió que J.E Meade y Richard Stone elaboraran el libro “An Análisis of the Sources of War Finance and an Estimate of the National Income and Expenditure in 1938 and 1940” que fuera publicado por el Tesoro Inglés en 1941, y en el que se mostraba tres “Cuentas Nacionales” referidas al ingreso nacional, los ingresos y gastos de los hogares y las “entradas y salidas “ del gobierno, y por primera vez mostraba al Presupuesto General del Estado como parte integrante de un balance económico. La Contabilidad Nacional es una herramienta relativamente reciente, que en su forma actual, aparece durante la Segunda Guerra Mundial en Inglaterra. A partir de 1945 comienza a extenderse los primeros modelos de cuentas nacionales. En 1950 La OECE, precedente de la OCDE publica el denominado "Sistema simplificado de contabilidad nacional" que es primer intento de homogeneizar los criterios de contabilización. A partir de ese momento, la Organización de las Naciones Unidas comienza un proceso normalizador publicando, en 1953, “Un sistema de Cuentas Nacionales y correspondientes cuadros estadísticos”, que constituye el primer sistema de contabilidad con alcance internacional. Este sistema es revisado en 1968 y sirvió como base para la elaboración del primer Sistema Europeo de Cuentas (SEC 1970), segunda edición revisada en 1979. En 1993, se implantó un nuevo sistema SCN-1993, con importantes reformas. Actualmente La Unión Europea tiene aprobado su Sistema Europeo de Cuentas (SEC-95) que se inserta plenamente en la metodología del SCN-93.

LOS PIONEROS.

Aunque los que podríamos denominar coloquialmente “padres” de la Contabilidad Nacional nacen a principio del siglo XX, los “pioneros” son muy anteriores. Como cualquier avance en la ciencia, la Contabilidad Nacional es fruto del trabajo de muchos autores previos que fueron sembrando durante un largo periodo de tiempo. De hecho, con su lectura, se adquiere conciencia de lo espuria que es la ciencia. Ellos comenzaron a estimar cifras, a hacer números económicos –macromagnitudes- ya en los siglos XVII y XVIII, pero carentes de medios y de respaldo estadístico, fueron tan incomprendidos como olvidados. Algunos tuvieron, por ende, un trágico final.
1652. William Petty, súbdito inglés, con diversos estudios y oficis pero sobre todo el de médico, desembarca en Irlanda para unirse al victorioso ejército de Cromwell. Acude con el cargo de phisician general. Encuentra allí primero la barbarie; la matanza de irlandeses ha sido tal que ha reducido la población en un tercio, unas 600.000 personas en opinión del propio Petty. Percibe después, la ignorancia y lo que, a menudo, le sigue, la inoperancia.
1707. Pierre Le Psant, sieur de Bisguilbert, ya entrado en años, y tras una vida dedicada al servicio del rey, parte desterrado hacia su confinamiento.
Boisguilbert (1646-1714), aristócrata francés, gestor público y hombre práctico, no había pretendido con sus diversos libros y escritos la elaboración de complejas teorías. Liberal furibundo, su deseo había sido influir en la difícil realidad de su época, y sobre todo luchar contra el ministro Colbert, luchar contra el intervencionismo. Para ello, publicó sus panfletos, hizo cientos viajes y visitas e inundó el ministerio de hacienda con interminables informes y memorándums.

En 1944 se creó una comisión en el seno del Consejo de Economía Nacional con el fin de estimar la Renta Nacional, “la Comisión de la Renta”. Una vez constituida, sin apenas medios, decide que sólo podrán utilizarse procedimientos indirectos, prolongándose sin remedio unas estimaciones previas del Servicio de Estudios del Banco Urquijo y de José A. Vandellós, ambas para 1923. Entonces: “la comisión elaboró un índice general de producción para el periodo 1913-1929, compuesto de uno de producción agrícola (ponderado al 60%) y otro de producción minera e industrial (ponderado al 40%). Teniendo en cuenta la proporcionalidad entre volumen de producción y renta, aplicó los índices generales de producción hallados sobre la renta nacional tomada como base de 1923 y calculó la renta nacional del periodo anteriormente citado. Pero considerando que las cifras resultantes de esta serie resultaban sobrevaloradas, halló otra serie de renta nacional según los índices de nupcialidad. Los promedios de ambas series fueron considerados como los valores verdaderos de la renta nacional”.
La contabilización de las magnitudes económicas cuenta ya con una gran tradición en los países occidentales al tiempo que se han hecho importantes esfuerzos de coordinación y homologación internacional de sistemas y metodologías. Existen métodos diversos de presentar y tratar la información que persiguen diferentes objetivos y que nacieron en épocas y por necesidades bien distintas. Ello no obstante, y tras variados intentos debidos a la OCDE o a la ONU, se ha conseguido una adecuada integración de la mayoría de ellos, buscando una complementariedad y apoyo común. Los distintos sistemas de cuentas económicas aparecidos tras la II Guerra Mundial de la mano de la moderna Macroeconomía no se han propuesto sino resumir y presentar bajo distintas metodologías: cuentas nacionales, tablas input output, cuentas financieras, cuentas satélites, ecuaciones econométricas... las grandes cifras del país o región, las "Macromagnitudes".



HECHOS HISTORICOS QUE DIERON ORIGEN AL SURGIMIENTO DE LA CONTABILIDAD SOCIAL.
La historia de la económica muestra que toda sociedad, consiente o inconscientemente, se enfrenta al problema de cómo dar respuesta a las cuatro preguntas básicas para llevar a cabo el proceso de producción, o sea, qué, cuánto, cómo y para quién producir. Depende de la forma en que se encuentren organizadas y el sistema económico que adopten para responder a estas preguntas y, sobre todo, para conocer quiénes son los encargados de plantearlas y de darles solución.
De esta forma y tomando en cuenta que principalmente existen dos tipos de economías, la del sistema socialista y la del capitalista (en sus diversos grados de evolución) los responsables de plantear y contestar estas preguntas son diferentes. En las primeras, es el órgano central de planificación y, en las segundas, dependiendo del grado de intervención estatal dentro de la actividad económica, o son los empresarios en el supuesto de que no exista una marcada participación del gobierno en la generación del producto, o bien alguna dependencia oficial que tenga como una de sus funciones específicas la de establecer y hacer congruente con la realidad la política económica del país (en el caso de que el aparato gubernamental aparte de las funciones netamente administrativas se aboque a producir ciertos bienes y servicios básicos para la comunidad).
Independientemente del tipo de sociedad de que se trata, es necesario contar con un marco de referencia que permita por un lado, conocer cuantitativamente la realidad económica del país y, por el otro, ofrecer elementos para el establecimiento de la política económica, facilitando la toma de decisiones con base a las prioridades establecidas.
La descripción de la actividad económica se hace mediante la construcción de modelos o sistemas que son denominados Contabilidad social. Dicha tarea forma parte de las disciplinas auxiliares de la ciencia económica; la economía descriptiva. Después de realizado el trabajo de descripción, es indispensable interpretar la actividad económica en una determinada realidad histórica concreta, mediante la identificación de relaciones de causalidad, de concomitancia, etc., dadas por el conjunto de leyes que son el objeto de la Economía Política. Sólo entonces es posible determinar criterio de acción para modificar esa realidad, a través del establecimiento y puesta en práctica de mecanismos o medidas para proseguir un rumbo específico, siendo ésta la finalidad de la Política Económica.
Es indudable que el objetivo de la contabilidad Social (en ocasiones denominada también Contabilidad Nacional, cuando se trata de hacer énfasis en el criterio geográfico), e mostrar los aspectos cuantitativos básicos de la economía de un país. Precisamente por eso una de las definiciones más usuales es la utilizada por Richard Stone, quien afirma que la Contabilidad Social "es un medio práctico para describir lo que acontece en una economía, en la medida en que ello puede ser expresado en términos de transacciones en un conjunto de cuentas establecidas con el principio de la partida doble". La importancia de la Contabilidad Social radica pues en que es una disciplina auxiliar de la Ciencia Económica aque sirve para descaribir una economía y facilitar su análisis económico.
LA CRISIS ECONÓMICA MUNDIAL DE 1929.
Fue ésta una época de expansión económica desenfrenada y de especulación bursátil sin precedentes, que culminó con la crisis de la bolsa de Nueva York en 1929, con la que se inició la más grave depresión económica que haya sufrido el país durante toda su historia: quebraron incontables industrias; (en 1933 había 17, 000,000 de obreros parados), se perdió la confianza y el pánico reinó por doquier. En estas circunstancias cayó el partido republicano. Los demócratas llevaron a la presidencia a Franklin D. Roosevelt, quien, mediante una serie de medidas audaces (como el cierre temporal de todos los bancos por orden presidencial), restauró la confianza del país en el gobierno y el sistema económico. Seguidamente obtuvo del Congreso la reglamentación del mercado de valores, la garantía oficial del los depósitos bancarios, el abandono del patrón oro y la desvalorización de dólar, el aumento del impuesto sobre la renta, la ayuda económica a los agricultores, la concesión de prestaciones sociales para todos los trabajadores, el mejoramiento de la legislación obrera, etc.
Después de la gran crisis de 1929, cuando la necesidad de los gobiernos de intervenir en la vida económica fue reconocida casi generalmente, la Ciencia Económica no pudo ofrecer el aparato metodológico y técnico para ejecutar esta intervención de manera científica y coordinada. La consecuencia fue que al principio la intervención se hizo de manera casual y no coordinada, con el resultado de que las mediad que los gobiernos tomaban para ayudar a algún sector del sistema económico resultaban casi invariablemente en consecuencia inesperadas y perjudiciales para otros sectores y con frecuencia en el sector mismo que habían deseado ayudar. De esta experiencia resultaba la necesidad de idear una disciplina o técnica para descubrir las interrelaciones entre todas las partes de un sistema económico, de manera sistemática.
Desde entonces, sin embargo, un gran número de economistas de algunos países se han preocupado por elaborar esa técnica. Este desarrollo ha sido estimulado por el hecho de que desde la fecha mencionada, a principios del cuarto decenio de este siglo, la economía mundial no ha conocido casi ningún período de equilibrio. En efecto, apenas las consecuencias de al gran crisis fueron vencidas, los gobiernos se encontraron con la necesidad de concentrar todos los poderes productivos de sus países en la producción bélica. El período de post-guerra ha planteado, en primer lugar, el problema de transformar el sistema productivo hacia los fines civiles; después, de nuevo, la guerra de Corea ha necesitado un regreso a la producción civil en algunos países y sectores, junto con una febril producción bélica en otros
LA INTERVENCION DEL ESTADO EN LA ECONOMÍA
Los participantes en las transacciones son muy numerosos y de muy diversos tipos, por lo que se hace necesario agruparlos en diferentes sectores o en clases perfectamente definidas. Para tal efecto es común clasificarlos en: empresas, unidades familiares o familias y estado o gobierno en general.
En los países en donde el gobierno interviene directamente en la distribución de los recursos, las distintas dependendecias se reúnen para establecer programas y estimaciones que respondan a la realidad, tomando en cuenta la acción recíproca entre cada uno de ellos para evitar el desperdicio de recursos.
Para los países cuya política económica descansa principalmente en políticas monetarias y fiscales, sin una intervención estatal importante en la producción, las cuentas nacionales son también de utilidad, porque proporcionan directrices para estimar las probabilidades de que ocurran tales o cuales acontecimientos económicos, y el carácter de los ajustes que hay que hacer en las políticas ya existentes para asegurar la estabilidad económica.



CUENTAS NACIONALES EN AMÉRICA LATINA

Dada la recomendación que el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas formuló a sus Estados miembros sobre la conveniencia de utilizar el Sistema de Cuentas
Nacionales de 1993 (SCN 1993) en la elaboración de sus estimaciones oficiales de cuentas nacionales, la mayoría de los países de la región, paulatinamente y con distintos grados de intensidad y profundidad, se han incorporado al proceso de implementación de las recomendaciones que contiene dicho sistema en la elaboración de sus estimaciones oficiales de cuentas nacionales.
Pese a que los progresos son significativos en catorce de los 33 países de la región, se presentan los cálculos de cuentas nacionales con el esquema del SCN
1968; por tanto, todavía no es posible utilizar el marco conceptual del SCN 1993 en la elaboración de las estimaciones regionales de cuentas nacionales en este
Anuario.
En consecuencia, los conceptos y clasificaciones que figuran en los cuadros sobre cuentas nacionales corresponden a la tercera revisión del Sistema de Cuentas
Nacionales de las Naciones Unidas (SCN, Rev. 3) y a la segunda revisión de la Clasificación Industrial
Internacional Uniforme de todas las actividades económicas (CIIU, Rev. 2).

Para mantener el principio de comparabilidad internacional y teniendo en cuenta que las cuentas nacionales tienen distintos grados de desarrollo y uniformidad entre los países de la región, se han seleccionado las estimaciones de aquellos agregados de elaboración más generalizada en los cálculos nacionales que sean importantes desde el punto de vista de los indicadores económicos. Asimismo, el detalle de las respectivas clasificaciones se ha simplificado y limitado a las aperturas que permitan presentar los datos por países en la forma más homogénea posible y efectuar su agregación a fin de obtener las estimaciones correspondientes al conjunto de América Latina y el
Caribe y facilitar el uso e interpretación de los datos a los usuarios.
Con tal propósito, la clasificación del producto por clase de actividad económica se presenta al nivel de las grandes divisiones de la CIIU, Rev.2 (sectores económicos) sin efectuar la separación propuesta en el
SCN, Rev. 3, por tipos de productores, que distingue entre industrias, productores de servicios gubernamentales, productores de servicios privados sin fines de lucro que se prestan a los hogares y servicios domésticos. Como excepción y por la importancia que revisten, se presentan por separado las actividades correspondientes a los servicios de vivienda, en la gran división 8, y a los servicios gubernamentales, 5 en la gran división 9.
La base de valoración de las distintas estimaciones se indica en los respectivos cuadros, señalándose si están expresadas a precios de mercado o al costo de factores, a precios corrientes o a precios constantes. Cuando en un cuadro no figura la base de valoración, se entiende que las series de datos están medidas a precios de mercado, y si no se indica lo contrario, a precios corrientes.
Los valores a precios de mercado se diferencian de los valores al costo de factores por incluir los impuestos indirectos netos de subsidios. Los valores a precios corrientes indican que los flujos de bienes y servicios están valuados a los precios del año en que se realizaron las transacciones; los valores a precios constantes representan flujos de bienes y servicios que están valuados a los precios que ellos tenían en el año que se ha tomado como base.
Por otra parte, corresponde aclarar que las estimaciones de los componentes del gasto final están valoradas a precios de comprador, en tanto que las series de los valores agregados sectoriales están medidas a precios de productor. Los valores de comprador se refieren al valor de los bienes y servicios en el punto de entrega al comprador, es decir, una vez añadido al valor de productor los márgenes de distribución y de transporte. Los valores de productor corresponden al valor de los bienes en el establecimiento de los productores, y el valor agregado de cada actividad a precio de productor es igual al valor de la correspondiente producción bruta a precio de productor menos el valor a precio de comprador del respectivo consumo intermedio.
Cuando se considera la economía en su conjunto, la parte de los impuestos sobre los productos menos las subvenciones que fue incluida en las utilizaciones de bienes y servicios, pero no considerada en el valor agregado de cada sector, se añade a éste, para que cuando se sume el valor agregado de todos los sectores de la economía, se obtenga un monto similar al del producto que se obtiene por la agregación de sus componentes por el lado de las utilizaciones. Para designar el producto total de la economía y agregados similares, las expresiones “a precios de mercado” y “a valores de comprador” son equivalentes y se usan indistintamente.

SERIES REGIONALES

En esta edición se incluyen datos nacionales y regionales que corresponden a estimaciones de las series del producto y del ingreso valuadas a precios constantes de 1995.
Las series a precios constantes de 1995 incluidas en esta publicación están referidas al origen del producto interno bruto por clase de actividad económica, al destino por componentes del gasto del producto y al ingreso bruto real. Estas estimaciones, calculadas a partir de los datos oficiales que los países proporcionan periódicamente a la CEPAL, fueron complementadas para los efectos del cálculo regional con información oficial que se solicitó expresamente a fin de que el cálculo realizado con base 1995 arrojara resultados lo más homogéneos posibles, y que al mismo tiempo, permitiera su agregación regional.
Los conceptos, clasificaciones, definiciones y categorías utilizados se ajustaron a las recomendaciones de las Naciones Unidas y a los manuales y orientaciones técnicas que la mayoría de los países del área está utilizando para hacer sus estimaciones originales.

COMERCIO EXTERIOR

Índices del comercio exterior

El cálculo de los índices del comercio exterior con base 1995=100 comprende índices para bienes y para servicios. Para calcular los índices del comercio exterior con base 1995=100, fueron seleccionados los bienes más representativos del comercio exterior de cada país, definiéndose las “muestras” sobre la base de los siguientes criterios:
a) Restricción de valor. Se consideraron sólo los productos que superaban un determinado valor a precios corrientes; por lo general se trató de una proporción fija de las exportaciones o importaciones
b) Relativa homogeneidad de los productos incluidos en cada partida, que supone que los productos sujetos a comparación posean características básicas similares.
La selección de la muestra se realizó sobre la base de las partidas ordenadas según la Revisión 2 de la Clasificación Uniforme para el Comercio Internacional (CUCI-Rev.2). Se utilizó principalmente la información contenida en el Banco de Datos del Comercio Exterior de América Latina y el Caribe (BADECEL), que mantiene la División de Estadística y Proyecciones Económicas de la CEPAL. Complementariamente, se recurrió a diversas publicaciones sobre el comercio exterior de los países.
Para obtener los índices implícitos de valor unitario sobre el total de las exportaciones e importaciones se calcularon valores constantes para la parte excluida del universo de cada Sección de la CUCI, y se deflactaron por el índice resultante de la muestra cuando se trataba de productos homogéneos que tenían una alta representatividad como, por ejemplo, determinados tipos de materias primas. Sin embargo, en el caso de productos heterogéneos con baja representatividad, como maquinaria y equipo, se utilizaron índices internacionales publicados por organismos especializados o por países desarrollados.
En el cálculo de los índices del comercio exterior de servicios se utilizaron las aperturas que se presentan en la quinta edición del Manual de balanza de pagos del Fondo
Monetario Internacional. El comercio de servicios se dividió en servicios de transportes, viajes y otros servicios. Para cada una de estas categorías se calculó un índice de precios sobre la base de la información recibida de los países y de organismos internacionales especializados.
Para realizar el cálculo de los índices de valor unitario del conjunto regional se obtuvieron valores corrientes y constantes mediante la agregación de los respectivos valores en cada país, y se aplicó la fórmula de Paasche, cuyas características se explican más adelante.
Mediante los índices del comercio exterior de bienes se midieron las variaciones del valor, del quantum, del valor unitario, de la relación de precios del intercambio y del poder de compra de las exportaciones.
El índice del quantum se construyó utilizando la fórmula de Laspeyres, que contempla ponderaciones fijas del año utilizado como base. En cambio, el índice del valor unitario se calculó mediante la aplicación de la fórmula de Paasche, que se basa en ponderaciones de cada año. El índice del valor unitario de las exportaciones y de las importaciones está calculado sobre valores FOB.
Como es natural, los resultados obtenidos presentan las limitaciones inherentes a fórmulas como las del tipo
Laspeyres y Paasche. La elección de estas fórmulas obedeció a que su combinación satisface la propiedad de reversión de factores, de manera que al multiplicar un índice del quantum calculado con la fórmula de Laspeyres por un índice del valor unitario calculado con la fórmula de Paasche, se obtiene un índice del valor. Lógicamente, al ser reversibles los factores, cada índice puede obtenerse despejando la ecuación: valor = valor unitario x quantum.
El índice de la relación de precios del intercambio se define como el cuociente entre el índice del valor unitario de las exportaciones y el índice del valor unitario de las importaciones, ambos referidos a la misma base.

LAS CUENTAS NACIONALES EN LA REGIÓN SAN MARTÍN

Estructura Productiva

De acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) publicada para el año 2007, el Valor Agregado Bruto del departamento de San Martín representó apenas el 1,2 por ciento del total país, y se sustenta principalmente en los
sectores agropecuario con una participación de 27,9 por ciento, otros servicios con 14,8 por ciento, manufactura con 14,5 por ciento y comercio con 13,1 por ciento; seguidos por servicios gubernamentales con 11,9 por ciento, transportes y comunicaciones con
6,5 por ciento, construcción 5,4 por ciento, restaurantes y hoteles con 5,0 por ciento y electricidad y agua con 0,9 por ciento.
Luego de un proceso largo de estancamiento y después de haber soportado un ambiente convulsionado por el narcotráfico y el terrorismo, actualmente, la región San
Martín se encuentra en franco proceso de crecimiento y desarrollo, debiendo aún superar problemas de escasa tecnificación e insuficiente infraestructura de transportes y comunicaciones.







San Martín: Valor Agregado Bruto
Valores a Precios Constantes de 1994
(Miles de nuevos soles)

ACTIVIDADES
2007
ESTRUCTURA %
Agricultura, Caza y Silvicultura
541 038
27,9
Pesca
337
0,0
Minería
57
0,0
Manufactura
281 743
14,5
Electricidad y Agua
18 172
0,9
Construcción
103 602
5,4
Comercio
253 970
13,1
Transportes y Comunicaciones
124 897
6,5
Restaurantes y Hoteles
96 408
5,0
Servicios Gubernamentales
229 392
11,9
Otros Servicios
286 850
14,8
Valor Agregado Bruto
1 936 466
100,0

Fuente: INEI – Dirección Nacional de Cuentas Nacionales.













PRINCIPALES ACTIVIDADES PRODUCTIVAS

Sector Agropecuario

El sector agropecuario de la región San Martín, con una participación de 27,9 por ciento en la generación del VAB departamental, es la primera actividad productiva regional en orden de importancia. Es la actividad generadora de empleo rural, productora de alimentos para las ciudades y de materia prima para la agroindustria.
En los últimos años la actividad agrícola de la región San Martín ha integrado mayor tecnología a la explotación de la tierra, al utilizar maquinaria agrícola, así como fertilizantes y pesticidas; lo que ha permitido recuperar extensas áreas agrícolas, ante abandonadas luego de una efímera producción bajo el sistema de rozo, tumba y quema, muy tradicional en la Amazonía; esto como resultado de la afluencia de colonos provenientes de regiones con mayor desarrollo agrícola y por la mayor integración lograda tras la mejora de las vías de comunicación.
En cuanto a la actividad ganadera desarrollada en la región San Martín, ésta se caracteriza por ser extensiva y tradicional, usa grandes extensiones con pasturas naturales de baja calidad nutritiva, generalmente sin separación de potreros y bajo el sistema de pastoreo continuo. El ganado vacuno predominante es del tipo criollo con diferentes grados de mestizaje, como el Bos Indicus, llamado cebú de la Raza Brahman.
Como alternativa para producción de carnes y leche se ha cruzado el ganado Cebú
Nellore con el Brown Swiss (ganado amazonas).
Con la mayor integración y tecnificación que se viene introduciendo en la región San
Martín, la ganadería se va orientando a ser mucho más intensiva, de doble propósito e introduciendo pautas ecológicas para lograr una mejor explotación de los sistemas pastoriles.

Principales Cultivos
En términos de valor de la producción total, el arroz cáscara es el primer cultivo en orden de importancia, seguido de café, plátano, maíz amarillo, palma aceitera, yuca, cacao, caña de azúcar, algodón, papaya y naranja. En los productos pecuarios destaca en orden de importancia carne de aves, de vacuno, huevos, carne de porcino y leche.
Ésta última ha sido impulsada por el acopio de la empresa Lácteos San Martín del
Grupo Gloria.

Sector Pesca
La actividad pesquera, tanto de tipo continental como acuícola tiene menor representatividad tanto en la generación de valor agregado como de empleo, comparada con la generada con otros departamentos de selva como Loreto y Ucayali, debido a sus características geográficas; limitándose a la extracción de especies para el autoconsumo como paiche y dorado, los cuales se consumen en estado fresco en los mercado locales.
Frente a esta situación, la Dirección Regional de Producción ha dirigido su interés en desarrollar la acuicultura, mediante la instalación y promoción de unidades productoras privadas (granjas acuícolas), donde se crían especies tropicales de fácil adaptación y manejo.
El desarrollo de la acuicultura en la región San Martín está sustentado en el cultivo de la "tilapia". Su cultivo, cuestionado en la cuenca amazónica argumentando el carácter depredador de la especie, se viene revirtiendo con la cría de especies amazónicas como el paco, el boquichico y la gamitada; además del camarón de Malasia con buenos resultados.
San Martín cuenta con un área de 151 Has. Otorgadas con autorización o concesión para el desarrollo acuícola. Actualmente, 84 Has. Vienen siendo utilizadas en la producción acuícola de subsistencia y el resto en producción de menor escala.

Sector Minero
La actividad minera en la región es incipiente, con un gran desconocimiento del potencial y reservas mineras. Se conoce que la actividad principal es la explotación de materiales de construcción, especialmente arcillas especiales para ladrilleras y arenas cuarcíferas para agregados de construcción, además de la actividad aurífera explotada de manera artesanal. Las principales canteras o yacimientos de caliza existentes son:
- Carretera Tarapoto-Yurimaguas, Km.11 y Km. 18-25.
- Shapaja, cerca de la margen izquierda del río Huallaga.
- Panazapa, Km. 58 de la carretera Tarapoto-Moyobamba
- Sector Rioja-Tioyacu, Km. 18.
- Cerrito Romero, sobre el río Soritor a 14 Km. de la ciudad.
Dentro de los minerales no-metálicos se ha comprendido una gran cantidad de depósitos, algunos de uso masivo en la alimentación y otros de uso industrial, o sin uso todavía, pero que carecen de estudios técnicos, desconociéndose su magnitud y reservas. Estos depósitos están constituidos por sal, arena, cuarcífera, arcillas, yeso, carbón fluorita, principalmente.

Sector Manufacturero
La manufacturera es el tercer sector en orden de importancia, después de los sectores agropecuario y otros servicios, con un aporte de 14,5 por ciento al VAB generado en el departamento.
Destacan las industrias de aceites y manteca de palma aceitera, jabones de palma aceitera, conservas de palmito, chocolates, quesos, bebidas gaseosas, puros de exportación, madera aserrada, parquet, cemento y molinería de arroz y maíz amarillo.
Dentro de pocos meses (a fines de 2008) en la región de San Martín se comenzará a producir biodiesel, a partir de la palma aceitera, por parte de empresas del Grupo
Romero.

Sector comercio
Esta actividad ocupa el cuarto lugar en orden de importancia, después de los sectores agropecuario, otros servicios y manufactura, con un aporte de 13,1 por ciento al VAB regional.
El comercio al por menor es una de las principales actividades generadoras del movimiento económico de la región, cuyo flujo comercial incluye artículos provenientes de la costa, al no contarse con productos manufacturados en la región. Desde la región
San Martín se sigue produciendo y enviando a la costa arroz, maíz, algodón, café, soya, tabaco y maderas.

Sector Transportes y Comunicaciones
El sector transportes y comunicaciones aporta el 6,5 por ciento al producto bruto interno.
Las vías más utilizadas son la terrestre y aérea, aunque también se utiliza la vía fluvial.
La red vial de carreteras comprende 1 506,56 Km., correspondiendo 622,95 km. a la carretera marginal, 85,55 Km. de red departamental y 798,06 Km. de red vecinal. Las carreteras más importantes son las transversales o de penetración, destacando entre ellas:
- Carretera Chiclayo-Olmos-Orellana-Borja-Río Marañón (hasta Saramiriza).
- Otra vía de penetración es la carretera que une la ciudad de Yurimaguas con Tarapoto y de allí se conecta por la Carretera Marginal de la Selva hasta Tingo María.
El departamento de San Martín tiene 7 aeropuertos, de los cuales dos podrían recibir aviones grandes.

Bibliografía:

CEPAL, Anuario estadístico de América Latina y el Caribe, 2004

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